Bombo
El Tapado: Czerniak
Para Czerniak, la música fue primero un sueño y después una promesa. De chico, se perdía viendo videos de Creamfields y bailaba solo en su habitación, imaginándose en ese escenario. Pero fue en 2015, en una Time Warp, cuando algo hizo clic: “Recuerdo ver cómo manejaban a la gente solo con la música. No saqué la mirada de la cabina. Ese día me prometí que iba a dedicarme a esto”.De esa promesa nació Czerniak, un proyecto que eligió llevar su propio apellido como bandera. “Es el puente entre mis gustos musicales y el público. No hay nada que me represente mejor que eso. Es mi identidad”.Con el tiempo, la producción se volvió central en su camino y, en los últimos dos años le dio un peso mayor al estudio, cansado de no sentirse representado por la música que salía a diario. Si tiene que elegir, destaca dos tracks propios: “We Are”, editado en vinilo y que le es “un símbolo de resistencia y cambio”, y “Translator”, aún inédito, donde siente que logró su sonido más maduro y personal.Además de su faceta como DJ y productor, Czerniak impulsa Duat, un ciclo de eventos con una idea clara: sets largos, open to close, que permitan a los artistas contar una historia completa. “Hasta ahora hice dos ediciones, una con Emiliano Demarco. No es algo que desarrolle siempre, pero nunca le cierro la puerta a una gran idea”.El próximo gran desafío llega este 11 de octubre, cuando se presente como headliner en el showcase de Divergente en Crobar. “Es muy especial. Te pone a prueba y te obliga a superarte. Quiero que el público sienta la energía y la pasión que pongo en esto”.Optimista con el presente de la escena local, celebra que hoy haya más espacios para los artistas. “Mientras más lugares, más exposición y más crece el circuito. Espero poder aportar para abrir ese camino también a las próximas generaciones. Hay mucho potencial”.Y aunque los planes se acumulan, mantiene los pies en el ahora. Antes de fin de año lanzará tres producciones, una de ellas en un sello que siempre soñó, y ya prepara una fecha en el país vecino. “Esta profesión te obliga a vivir en el futuro. Es básicamente trabajar con la ansiedad. Pero me encanta. Cada paso es parte de la promesa que hice aquella noche en Time Warp”.